Tú

[Jesús SM]

Bienvenido. Y felicidades. Estoy encantado de que pudieses conseguirlo. Llegar hasta aquí no fue fácil. Lo sé. Y hasta sospecho que fue algo más difícil de lo que tu crees.

En primer lugar, para que estés ahora aquí, tuvieron que agruparse de algún modo, de una forma compleja y extrañamente servicial, trillones de átomos errantes. Es una disposición tan especializada y tan particular que nunca se ha intentado antes y que solo existirá esta vez. Durante los próximos muchos años -tenemos esa esperanza-, estas pequeñas partículas participarán sin queja en todos los miles de millones de habilidosas tareas cooperativas necesarias para mantenerte intacto y permitir que experimentes ese estado tan agradable, pero tan a menudo infravalorado, que se llama existencia.

Por qué se tomaron esta molestia los átomos es todo un enigma. Ser tú no es una experiencia gratificante a nivel atómico. Pese a toda su devota atención, tus átomos no se preocupan en realidad de ti, de hecho ni siquiera saben que estás ahí. Ni siquiera saben que ellos están ahí. Son, después de todo, partículas ciegas, que además no están vivas. (Resulta un tanto fascinante pensar que si tú mismo te fueses deshaciendo con unas pinzas, átomo a átomo, lo que producirías sería un montón de fino polvo atómico, el cuál nada habría estado nunca vivo pero todo él habría sido en otro tiempo tú). Sin embargo, por la razón que sea, durante el período de tu existencia, tus átomos responderán a un único impulso riguroso: que tú sigas siendo tú.

La mala noticia es que los átomos son inconstantes y su tiempo de devota dedicación es fugaz, muy fugaz. Incluso una vida humana larga sólo suma unas 650.000 horas y, cuando se avista ese modesto límite, o en algún otro punto próximo, por razones desconocidas, tus átomos te dan por terminado. Entonces se dispersan silenciosamente y se van a ser otras cosas. Y se acabó todo para tí.



Extraído del libro: "Una breve historia de casi todo" de Bill Bryson. Primeros 4 párrafos de la introducción.

[Paulino]

Después de leer detenidamente estos bonitos párrafos, dan pie a reflexionar un poco acerca de lo que en realidad puede que sea la realidad, valga la redundancia.

Humorísticamente y/o desde la simpleza se podría resumir: ¡...y tanta molestia para que cada átomo se vaya a otro sitio sin dejar rastro!

Desde una mente creyente: El segundo e incluso el tercer párrafo podrían ser interpretados como pruebas irrefutables de la existencia de Dios. Pero el cuarto párrafo...es demoledor, dejando una angustia vital.

Desde una mente no creyente: La vida es una quimera muy corta e igual que viene se va a otro sitio.

El problema lo tiene gente como yo, que "ni es creyente, ni deja de serlo".

Sí que parece plausible es que algunos de esos átomos errantes de, dios sabe quién o qué, son los que pecibimos a través de nuestras lentes en forma luces y colores.

[Manueleon]

Bonitas reflexiones, pero la Naturaleza es indiferente a las pasiones humanas.
Es una lástima pero es así.
Salu2

[antonio]

Yo creo, que si este tema lo miramos desde una perspectiva "panteista", el universo, nuestra existencia se torna más tranquilizadora, finalista  y con un matiz de eternidad del que el ser humano también participa.

[Jesús SM]

He trascrito aquí este párrafo porque de una manera explicada muy sencilla, nos dice lo que realmente somos, nosotros y la materia conocida del Universo.

Todo está formado por átomos. En nuestro Sistema Solar, la mayor parte de ellos creados en el interior de lo que fueron estrellas anteriores a nuestro Sol, incluidos los átomos que nos forman.

Y es así, como dice el autor. Por el motivo que sea, o sin motivo aparente, un montón de átomos se han unido para darnos forma como individuos y cuando dejemos de existir, esos mismos átomos formarán otras cosas, y antes de formarnos, ya han sido otras cosas, y así seguirán de manera infinita, en este Sistema Solar o vagando por el Universo, hasta quizás formar parte de otro sistema.

Es la naturaleza misma. Nada que ver con religión y demás inventos humanos. Seres que somos unos recien llegados a este Universo, seres que hace muy poco tiempo empezamos a ser "construidos" por unos cuantos átomos.


Más que para reflexionar, es para darnos cuenta lo que realmente somos. Las simpleza y a la vez complejidad de nuestro propio ser.

[Aster]

En definitiva, lo entiendo como reflexiones filosóficas acera de la EXISTENCIA del mundo inanimado y de la ESENCIA ( o sea aquello por lo que una cosa es lo que es y no es otra cosa distinta). Repito la Existencia  (tiene que haber una "razón de ser" para que algo exista, si no hubiese una razón de ser, no existiría tal ser en cuestión, el que sea) y la Esencia (definida anteriormente) del mundo inanimado es una cuestión no baladí, pero si damos el salto de lo inanimado a lo animado (lo que tiene ánima, alma, mente, conducta, consciencia) da igual cómo lo llamemos) pasamos a lo que se denomina unión mente-cuerpo para unos, alma-cuerpo para otros, o como designa Descartes "res cogitans"
o sea la cosa pensante y "res extensa" o sea la materia, en definitiva cuerpo y alma, indaguemos ahora en los átomos del cuerpo y en los del alma (físicos y psicólogos). Ciertamente me he desviado de la "materia" del universo, pero hay quien sostiene que la materia NO EXISTE porque la materia en realidad es condensación de ENERGIA. Desde luego los seres del reino animal somos intercambio de energía con el medio, si se interrumpe ese intercambio de entrada y salida de energía en nuestro organismo, dejamos de existir como tales, nos transformamos en otra cosa, no en personas. Bueno, creo que me enrollo, pasemos a admirar el universo sin más.

[antonio]

Yo no creo en el panteismo, sensu estricto, pero he practicado la meditación, ya hace mucho tiempo, en el contesto del Yoga, y he llegado a sentir la "fusión con el cosmos".He percibido, la desaparición de mi individualidad, de todos los átomos, la energía de mi cuerpo , tal vez con ese intuitivo hemisferio cerebral derecho, para sentirme parte de ese todo y conectado a un tiempo más amplio, más allá de la frontera del limitante del tiempo presente.Nota: nunca he esnifado nada, ni tengo ningún tipo de tendencia de esa naturaleza. También soy consciente que nuestro cerebro puede sintetizar opiáceos...  De acuerdo totalmente con los conocimientos de la ciencia al momento de hoy, opino que hay un más allá que nuestro ser es capaz de percibir, intuir o transcender y a ese terreno se llega por procedimientos muy diferentes a los científicos, sin llegar a la contradicción con los mismos.La ciencia, a través  de nuestro hemisferio cerebral izquierdo, aporta un panorama en blanco y negro de nuestro Universo,  la, llamemosla así:nuestra intuición, correspondiente al hemisferio cerebral  derecho nos dan ese color y comprensión total más hermosa y pienso ,yo que más real.Necesitamos de todo el potencial de nuestro cerebro para comprender toda la dimensión de nuestro Universo.Tal vez sean tonterías pero me gusta pensar así.

[Jesús SM]

Jorge, por si te ves identificado en esta cita:

"Un físico es el medio que tienen los átomos de pensar en los átomos"

[Jorge Carro]

Primero, cuando pusiste este post leí así por encima los párrafos esos, que me resultaron familiares, y hasta ahora no me he dado cuenta y es que ese libro me lo he leído yo, que despiste no haberme dado cuenta, esta genial la verdad.
Y con respecto a la frase, no podría estar más de acuerdo. Aunque si matizaría la frase acabándola como "de pensar en el comportamiento de los átomos" para que abarque un campo mayor. Pero es cierto, un ser humano no es más que un conjunto de átomos cuidadosamente organizados, diseñado para realizar cosas extraordinarias, y la física se preocupa de como interaccionan ellos (o sus partes) entre sí.