Por desgracia este año de pandemia, tampoco podremos viajar al eclipse total de Sol que tendrá lugar a final de año. Además de por el virus y los exhaustivos controles y requisitos, se trata de un viaje extremadamente caro y complejo, ya que el eclipse se produce en la Antártida. Como consuelo, nos queda que hemos podido disfrutar de un pequeño eclipse parcial de Sol desde España. Aunque en realidad se trata de un eclipse anular, tampoco hemos considerado desplazarnos a Canadá para observarlo, por ese motivo el eclipse lo vemos en "casa".

Hoy es la noche previa al eclipse, y ya que tenemos una noche despejada he quedado con Juan Carlos para aprovechar e ir a ver las estrellas y así poder montar con oscuridad y el alinear muy bien las monturas.

A eso de la una de la madrugada llego a Salamanca y nos fuimos hacia el punto de observación. Nos tomamos nuestro tiempo para montar tranquilamente. Una vez que estaba montado todo el equipo, sacamos el Dobson para observar el cielo. Estuvimos viendo varios objetos con el Dobson como M13, M57, M27 y algunos otros objetos de cielo profundo, pero lo que nos impacto de verdad durante la noche, fue ver los planetas Júpiter y Saturno ya que había un Seeing bastante bueno y pudimos ver con muchos aumentos los planetas con una cantidad de detalles increible.En Júpiter veíamos hasta las más pequeñas nubes y en Saturno incluso se llegaba a atisbar detalles de las nubes cercanas al polo. También aprovechamos para sacar unas fotos de la Vía Láctea. Casi sin darnos cuenta el crepúsculo anunciaba el comienzo de una jornada muy interesante.

Estuvimos viendo la salida del sol mientras volábamos un dron para sacar algunas imágenes. Incluso con el Sol por encima del horizonte seguimos viendo el planeta Júpiter con el telescopio, lo vimos incluso pasada una hora después del amanecer.  Sobre las 9 de la mañana comenzó a llegar la gente, el primero fue Pablo y Vanessa y después fueron llegando al resto. Incluso a esa hora todavía podíamos ver Júpiter a través del telescopio a plena luz del día algo que hace mucho tiempo que no conseguía. Aún nos quedaba un rato para comenzar el eclipse, tiempo que dedicaron el resto de los socios para montar sus respectivos equipos. Desde la salida del sol hasta prácticamente comenzar el eclipse estuvimos observando el sol con el telescopio de h-alpha y con el Dobson de 12 pulgadas. 

El sol mostraba  un par de grupos de manchas solares  bastante curiosos. En H Alpha estaba bastante activo, ya que tenía unas protuberancias bastante bonitas  y grandes y otras algo más pequeñas repartidas por el disco solar.  También mostraba un filamento  y un par de regiones activas correspondientes a las manchas solares. Unos 10 minutos antes del inicio del eclipse preparamos los ordenadores y cámaras para poder retratar el evento.

A la hora prevista el eclipse comenzó Primero como un pequeño mordisco que rápidamente comenzaba a crecer más incluso de lo que nos esperábamos. Durante todo el eclipse estuvimos alternando entre grabar imágenes con los telescopios y las cámaras y verlo visualmente tanto con gafas de Eclipse como por telescopios con filtros e incluso sacamos un rato para hacer el efecto pinhole que quedó bastante chulo. En el momento del máximo nos quedamos sorprendidos porque a pesar de que era un eclipse de poca magnitud, visualmente parecía que era mayor. Había una temperatura aproximada de 28 grados y un sol brillando en un cielo completamente despejado. Ese cielo despejado nos estuvo acompañando durante todo el día.  Tras el máximo, la luna se alejaba lentamente del sol hasta que a la hora prevista abandono el astro rey.  Durante toda la mañana el seeing estuvo muy bueno, solo  al final del eclipse empeoró,  pero no lo tenemos en cuenta ya que solo fue los últimos minutos.

Muy contentos por lo que habíamos visto, empezamos a recoger el gran equipo que teníamos montado. También aprovechamos un ratito para sacarnos una foto de grupo. Para celebrar que habíamos visto en Eclipse en unas condiciones prácticamente perfectas, estuvimos media horita tomando unos aperitivos o incluso comiendo un bocadillo mientras comentábamos lo bien que lo habíamos pasado durante el eclipse. Por último terminamos de recoger los últimos cacharros, nos despedimos y partimos hacia Salamanca.

Al llegar a casa alguno de nosotros comenzamos a procesar a una de las fotografías para compartirlas con el resto de los compañeros de la asociación. pese a ser un eclipse pequeño ha dado mucho juego y hemos podido disfrutarlo en casa.